El precio de transacción a la hora de negociar certificados de depósito se determina mediante un método de subasta. Durante esta subasta, se admiten órdenes de compra y de venta. El Mercado analiza estas órdenes y busca el nivel de precios que permite ejecutar el máximo volumen de órdenes. Dicho de otro modo, el Mercado intenta establecer el precio al que puede negociarse el número más alto posible de certificados de depósito.
Lo habitual es que exista un cierto número de órdenes de compra y de venta, con diferentes niveles de precio. El Mercado fijará el precio en el nivel que permita negociar el máximo número posible de certificados.
Ejemplo:
Durante una subasta, se presentan órdenes de compra y venta con distintos precios límite. Supongamos que el precio de transacción al que puede negociarse un número máximo de certificados es de 50 EUR.
Seguramente habrá también órdenes de compra con un precio límite superior a 50 EUR, por ejemplo 55 EUR, y órdenes de venta con un precio límite inferior a 50 EUR, por ejemplo 45 EUR.
El Mercado analiza todas las órdenes y busca el precio al que puede negociarse el máximo número de certificados. En este ejemplo, el Mercado fija el precio en 50 EUR, ya que es el valor que permite negociar el máximo volumen.
Eso significa que las órdenes de compra con un límite superior a 50 EUR, por ejemplo 55 EUR, también se incluyen en la liquidación de la subasta. Lo mismo se aplica a las órdenes de venta con un límite igual o inferior a 50 EUR, como 45 EUR.